EAMES FIBERGLASS CHAIR:
Convertida en una de las sillas más famosas de la historia, la tecnología ha permitido que la Fiberglass Chair vuelva a fabricarse en el material en que la concibieron Charles & Ray Eames, la fibra de vidrio. Vitra, la única empresa autorizada para fabricar los diseños del matrimonio norteamericano, presenta las nueva Fiberglass Chairs gracias a un nuevo método de fabricación y en seis de los colores originales: gris piel de elefante, pergamino, verde espuma de mar, pardo natural, rojo anaranjado y azul marino. Las carcasas pueden combinarse con una base de cuatro patas de madera o con la base metálica Eiffel Tower.
Historia de una silla.
Los inicios de esta silla se remontan a la década de 1940, cuando Charles y Ray Eames empezaron a estudiar la idea de una carcasa de asiento moldeada de una sola pieza que se adaptara a la forma del cuerpo humano. Utilizando la tecnología que ellos mismos habían desarrollado para el moldeado tridimensional de la madera contrachapada, los Eames crearon las sillas del Plywood Group, que se presentó en 1945. Tres años más tarde, participaron en el concurso internacional Low Cost Furniture Design, organizado por el Museo de Arte Moderno de Nueva York, con una silla basada en una carcasa de acero estampado que, aunque ganó el segundo premio, resultaba demasiado complicada y costosa para fabricarse en serie.
Un material utilizado en aviones.
La búsqueda de materiales alternativos les llevó a utilizar resina de poliéster reforzada con fibra de vidrio, un material que, hasta ese momento había sido utilizado por el ejército. Su moldeabilidad, rigidez y excelentes propiedades permitieron que los Eames lo utilizaran, por primera vez, en la industria del mueble. En 1950, nació la Fiberglass Chair, una silla con una carcasa de líneas orgánicas, realizada en una sola pieza, agradable al tacto y extremadamente confortable.
«La forma de la Eames Fiberglass Chair era la expresión culminante de los 11 años que Charles y Ray se dedicaron a estudiar intensivamente tres materiales fundamentales: madera, alambre y, por supuesto, plástico. Fue la expresión definitiva de su idea de diseñar lo mejor, para más gente y por menos. La silla se hizo inmensamente popular enseguida, llevando un nuevo tipo de belleza a la vida de muchas personas. Para mí, demuestra la genialidad del proceso de diseño, porque es una silla moderna de un material moderno y, sin embargo, la forma parece casi inevitable, como si llevara toda la vida entre nosotros», explica Demetrios Eames, nieto de Charles Eames.
Nace una estrella (del mobiliario).
La Fiberglass se lanzó al mercado en 1950 y, debido al éxito de su fórmula (una carcasa que se combina con diferente bases), pronto se amplió la gama de bases y colores. Fabricadas por Vitra para Europa y Oriente Medio desde 1957, durante la década siguiente las Fiberglass Chairs se convirtieron en un «clásico del diseño». Originalmente pensadas como muebles asequibles, de producción en serie, adecuados para el hogar, la oficina, salas de conferencias, cafeterías, auditorios y estadios, así como para muchos otros lugares, las sillas de fibra de vidrio fueron quedándose atrás ante los avances técnicos y la aparición de materiales más baratos. Esto hizo que Vitra dejara de fabricar las carcasas de fibra de vidrio a principios de la década de los 90, aunque unos diez años más tarde volvió a lanzar las sillas en una versión de polipropileno. Ahora, Vitra nos devuelve la Fiberglass en su esencia original.
LAS IMÁGENES:
Fotografía: © Eames Office
SOBRE CHARLES & RAY EAMES:
La colaboración entre Charles (St. Louis / Missouri, 1907) y Ray Eames (Sacramento, 1912) comenzó en 1940, cuando se conocieron en la Cranbrook Academie of Art que, por aquel entonces era un importante referente en el diseño norteamericano. Un año después, el arquitecto y la artista contraían matrimonio y se trasladaban a Los Ángeles, donde abrieron su propio estudio, la conocida Eames Office.
En las casi cuatro décadas siguientes, los Eames no sólo destacaron como diseñadores de muebles sino que también lo hicieron en arquitectura, montaje de exposiciones, realización de cortometrajes, diseño de juguetes, trabajos gráficos, textiles y fotográficos. Su propia casa, conocida como la “Casa Eames”, está considerada una obra maestra de la arquitectura moderna. Ubicada en lo alto de una colina con vistas al océano Pacífico, se fabricó con materiales industriales como trozos prefabricados de acero y un coste muy bajo.
A lo largo de su historia, también fueron pioneros en la utilización de nuevas técnicas como la fabricación de sillas con fibra de vidrio o resina plástica. Y durante la crisis vivida por Estados Unidos, uno de sus grandes valores fue saber aprovecharla para incorporar a la ética del sistema empresarial ideas como la apuesta por productos de calidad, sistemas de producción eficientes y llegar al mayor número de personas.
Respecto a su mobiliario, tras unos años de experimentación con la madera laminada conformada, en 1946, Evan Products comenzó a producir la Plywood Chair, que llegó a ser llamada “La silla del siglo”. A ella le seguirían la empresa Herman Miller, ubicada en Michigan, y después Vitra, que actualmente tiene los derechos de producción en Europa y Oriente Medio. La Plastic Chair, la Lounge Chair, la DCW o La Chaise son sillas de referencia en la historia del mobiliario moderno.
Resulta casi imposible valorar la relevancia que ha tenido la obra de los Eames para el desarrollo del diseño pero sí está claro que es el resultado de la colaboración entre dos personalidades y talentos que se complementaban a la perfección. Por desgracia, el torrente creativo de los Eames cesó con la muerte de Charles en 1978. Ray Eames falleció una década después. Sin embargo, su obra conjunta continúa viva y mantiene la misma relevancia que el día de su creación.
CHARLES & RAY EAMES EN INTERIORES MINIMALISTAS
SOBRE VITRA:
Uno de los nombres de referencia dentro del sector del mobiliario de diseño, la firma Vitra inició su actividad en el año 1953. Fue fundada por el empresario Willi Felhbaum y su esposa Erika cuando la pareja descubrió, durante su primer viaje a Estados Unidos, los muebles de Charles y Ray Eames en una tienda de Nueva York. Ese encuentro les llevó, una vez de regreso a Suiza, a convertirse en fabricantes de los diseños de la famosa pareja, así como los de George Nelson, Alexander Girard e Isamu Noguchi. El primer diseño que produjeron fue la silla Panton, diseñada por Verner Panton, en 1960.
Desde entonces, sus muebles para oficinas, hogar y espacios públicos se desarrollan en Suiza, aplicando un cuidadoso proceso de diseño que reúne los conocimientos de ingeniería de la empresa sumados al genio creativo de reconocidos diseñadores internacionales (Antonio Citterio, Ron Arad, Herzog & de Meuron, Jasper Morrison, Philippe Starck, Isamu Noguchi, Konstantin Grcic o Hella Jongerius, entre otros). Junto a ellos, la empresa ha sido galardonada con numerosos premios.
Pero Vitra va más allá del simple diseño de mobiliario con un proyecto integral representado por el Vitra Campus, donde se encuentran el Vitra Design Museum, creado por Frank Gehry, y el showroom VitraHaus, firmado por Herzog & de Meuron, los talleres, las colecciones y los archivos de la firma.
Además, consciente de la necesidad de una empresa y de una fabricación sostenibles, en 1986 creó el grupo de trabajo “Vitra y el medio ambiente”. Gracias a él, la firma suiza está en condiciones de presentar resultados en materia de desarrollo sostenible que abarcan casi un cuarto de siglo. Auditorías internas y externas otorgan la certeza adicional sobre el perfeccionamiento de todas las medidas.
VITRA EN INTERIORES MINIMALISTAS
Información e imágenes facilitadas por la firma
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