Pablo Delgado y Cristina Garau. Retratos Home e interior: David Zarzoso
MAXIMALE:
Maximale Studio es un estudio de arquitectura fundado, en 2022, por los arquitectos Pablo Delgado y Cristina Garau. Su trabajo desarrolla proyectos de diversas escalas y tipologías basándose en la búsqueda de estrategias concretas para alcanzar soluciones técnicas y estéticas aplicadas de manera individual a las necesidades de cada proyecto.
A través de una aproximación analítica y conceptual, el despacho, que tiene su sede en Madrid, define una arquitectura que utiliza la luz y la geometría para lograr proporción, armonía y coherencia.
Pablo Delgado y Cristina Garau apuestan claramente por prescindir de lo innecesario y por utilizar materiales que envejezcan bien, sus proyectos buscan respuestas a necesidades de índole social, cultural o medioambiental, promoviendo un diálogo constante entre diversas disciplinas como el arte, el diseño y la investigación. Maximale Studio es el resultado de la formación y experiencia profesional de sus fundadores en un contexto internacional.
MAXIMALE EN INTERIORES MINIMALISTAS
LA ENTREVISTA:
- Hace solo dos años que fundasteis Maximale Studio ¿Por qué decidisteis crear el estudio? ¿Cuál ha sido vuestra trayectoria anterior?
Yo (Cristina) estudié arquitectura en la Universidad de Navarra y en el IUAV (Instituto Universitario di Architettura di Venezia), además de cursar unos años el grado en Historia del Arte. Mi carrera profesional comenzó en Ámsterdam y, posteriormente, en Londres trabajando para estudios internacionales con proyectos de gran escala en BIG y Adjaye Associates.
Pablo es arquitecto por la Universidad de Sevilla y la École Nationale d’Architecture Paris Val de Seine, ciudad donde también estuvo trabajando para el estudio MARS Architectes. Su trayectoria profesional continuó en Londres trabajando en proyectos de retail para marcas como Burberry y Tiffany & Co.
Durante los años que vivimos en Londres, compartimos nuestro pensamiento en torno a la arquitectura y el diseño, así como la visión que teníamos sobre el ejercicio de nuestra profesión. Empezamos a trabajar en algunos proyectos juntos que nos permitieron apostar por Maximale y trasladarnos a Madrid para consolidar nuestro propio estudio.
El espacio de trabajo de Maximale en Madrid. Fotografía: David Zarzoso
- ¿Cada uno de vosotros dos tiene un rol distinto dentro del estudio?
Ambos trabajamos en todas las fases de proyecto, pero nos dividimos los diferentes proyectos que tenemos de manera que uno de los dos es el «director» y mantiene una relación más directa con el cliente y con todos los agentes profesionales que intervienen en su desarrollo. Sin embargo, todos los días ponemos las diferentes cuestiones o dudas en común porque valoramos mucho la opinión del otro.
- Vuestros proyectos de interiorismo respiran serenidad y calidez, aun utilizando muy pocos elementos decorativos ¿Podríamos decir que vuestro estilo es minimalista? ¿Cómo lo definiríais vosotros?
Sí, podríamos resumir nuestra filosofía creativa dentro del concepto del minimalismo, pero no se deriva de una decisión inicial de»‘ser minimalistas». Es el fruto de un proceso de reflexión interna con el que enfocamos nuestra forma de ver y hacer arquitectura. Utilizamos recursos como la luz, la geometría y soluciones constructivas coherentes para lograr proporción y armonía, que, a nivel espacial, se traducen en serenidad y calidez.
- ¿Cuáles son los principios básicos que se plantea Maximale a la hora de afrontar un proyecto?
Maximale es la traducción a muchos idiomas de «máxima», que entre una de sus acepciones significa «idea, norma o designio a que se ajusta la manera de obrar». En nuestro caso, lo entendemos como un principio que rige nuestra forma de hacer arquitectura y diseño.
Ésta se traduce en reflexionar en profundidad sobre los múltiples aspectos que intervienen en cada proyecto y en cómo podemos dar respuesta a todos ellos utilizando unos recursos mínimos, los necesarios para que el conjunto tenga coherencia y armonía. Si algo parece muy complicado o enrevesado, entonces probablemente la solución sea mejorable.
Reforma de un edificio histórico y siete apartamentos en Málaga. Fotografía: David Zarzoso
- ¿Cuál fue vuestro primer proyecto como Maximale?
La reforma de una vivienda en Madrid, la casa ML. Le tenemos un cariño especial a este proyecto por lo que significa para nosotros.
- ¿Qué buscáis transmitir en cada trabajo?
A nivel general, siempre intentamos visualizar el resultado como un espacio que aporte un valor añadido a la vida de sus habitantes. En cada proyecto buscamos transmitir los principios que rigen y cohesionan todo el proceso, desde su concepción hasta la finalización de la obra. Éstos cambian en función de la naturaleza de cada obra, su ubicación y entorno, las necesidades planteadas inicialmente, etc.
- ¿Con qué materiales os gusta más trabajar?
Lo que sí tenemos claro es no utilizar materiales sintéticos o materiales que no son lo que parecen, como imitaciones de maderas o piedras naturales. Estamos convencidos de que el mayor valor de una obra está en transmitir un rigor y una sinceridad constructiva que sólo se consiguen utilizando materiales «auténticos».
Creemos que esto es importante en una realidad actual en la que todo el mundo persigue el máximo resultado con la mínima inversión, pero muchas veces no se tiene en cuenta la durabilidad. La buena arquitectura es para toda la vida, por eso siempre apostamos por materiales que envejecen bien y que no resulten «de otra época» con el paso de los años. Hay un valor añadido que la pátina del tiempo solo les concede a estos materiales «sinceros».
Proyecto residencial en Sant Cugat del Vallés. Fotografía: David Zarzoso
- ¿Preferís que os encarguen proyectos residenciales o comerciales? ¿Cuál de ellos plantea mayores retos?
Nos gusta mucho trabajar con ambas tipologías. Los proyectos comerciales suelen ser un reto mayor a nivel creativo porque la imagen que transmite el espacio es un factor fundamental para la empresa o marca que hay detrás. Además, actualmente el retail cuenta con diseñadores y arquitectos muy buenos que generan una competitividad muy sana empujando a reinventar algunas ideas clásicas.
Por otro lado, los proyectos residenciales te permiten adentrarte en un conocimiento del usuario final mucho mayor, y eso se traduce en hacer un proyecto más a medida, con todos los retos que ello implica.
- ¿Cuál es la filosofía de vuestro estudio en cuanto a sostenibilidad?
Creo que gran parte la hemos adelantado ya hablando sobre los materiales que utilizamos en nuestros proyectos, apostando por los materiales naturales versus los sintéticos y por aquellos que tienen una vida más larga, reduciendo por tanto la necesidad de reemplazarlos.
En obra nueva, utilizamos recursos como la madera CLT para la estructura, ya que es un sistema eficaz y eficiente que además tiene un impacto medioambiental muy positivo en comparación con otras soluciones. También intentamos siempre que los materiales provengan de las cercanías del lugar de la obra.
- ¿En qué proyectos estáis trabajando ahora?
Ahora mismo tenemos varios proyectos muy interesantes, tanto residenciales como comerciales. La mayoría están en Madrid, pero tenemos otros en Mallorca, Málaga, Segovia, Ciudad de México y Milán.
- ¿Cuál sería el proyecto de vuestra vida?
Probablemente nuestra propia casa.
Csa Garós, un proyecto inspirado en la arquitectura vernácula del Vall d’Aran. Fotografía: David Zarzoso
Imágenes: cortesía de Maximale
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