Sus diseños se caracterizan por el uso de materiales orgánicos y ecológicos, que acostumbran a transformar o inventar para dar a luz a productos verdaderamente sorprendentes, más cercanos a la escultura que al mueble. Uno de sus trabajos más recordados es la silla Favela, realizada a partir de pequeños trozos de madera acumulada y encolada que se inspira en la manera de construir favelas en Brasil.

Juntos han trabajado para las marcas más prestigiosas del mundo y sus obras se han expuesto en el MOMA de Nueva York, en el Centro Pompidou de París, en el Vitra Museum de Alemania y en el Museo de Arte Moderno de Sao Pablo, entre otros muchos centros.