RESIDENCIA WILSON:
Ubicada en la Isla de las Monjas (Canadá), este proyecto de Entre Quatre Murs consistió en la reforma integral de una pequeña casa adosada siguiendo un estilo sencillo y funcional para la optimización del espacio, el uso de armarios a medida en cada estancia y una materialidad suave y luminosa.
La casa, que fue diseñada por el arquitecto canadiense Dan Hanganu en 1982 y no había sido renovada desde entonces, cautivó a sus propietarios por su exterior, que poseía todas las características del barrio y de la época: sencillez en sus líneas, ladrillo rojo, ventanas negras, pequeños toques de estilo retro en la fachada y, sobre todo, un gran patio trasero con una vegetación que permite apreciar el paso de las estaciones en el corazón de la ciudad.
Renovación de los interiores para satisfacer las necesidades de la vida cotidiana
En cuanto al interior, éste necesitaba urgentemente una renovación para que pudiera satisfacer las necesidades de la vida diaria. «Desde la fase de planificación, diseñamos una distribución completamente diáfana para la primera planta, además de abrir toda la fachada trasera, conectando el patio con el interior de la casa, y aportando la máxima luminosidad, además de dar sensación de amplitud a este pequeño primer piso de 62 m²», explica Debby Pagé, propietaria de la casa y diseñadora de interiores de Entre Quatre Murs.
La clave para que esta distribución funcionara fue la integración de armarios a medida en la mayoría de las paredes medianeras, permitiendo un almacenamiento adaptado a las necesidades del cliente, pero también creando una continuidad visual entre cada espacio.
La amplia cocina y su gran isla, el espacio más importante para los propietarios
«El desafío a la hora de lograr este diseño fue la estructura inusual para una casa de este tamaño», añade la diseñadora. «Originalmente diseñada con dos ejes de carga y el sistema de fontanería principal atravesando el corazón de la casa, la distribución original requería una revisión completa de estos elementos para dar cabida a la amplia cocina y su gran isla, que es el espacio más importante para mi pareja y para mí».
Situada en el corazón de la casa, la escalera y su claraboya sufrieron una completa transformación. De hecho, se replanteó cada detalle de la estructura de la escalera, utilizando todas las pautas conceptuales empleadas para el resto de la casa: líneas curvas con toques de madera y metal blanco. Con un diseño elegante, esta escalera escultural permite que la luz natural, procedente del tragaluz, inunde toda la casa con un suave resplandor.
Notable transformación de la primera planta
El primer piso, aunque relativamente impermeable al diseño existente del espacio, experimentó una notable transformación en la misma línea que la planta baja, con almacenamiento integrado diseñado a medida y ubicado para optimizar el espacio, el espacio de almacenaje y el uso diario por parte de los ocupantes.
En esta primera planta y de acuerdo al deseo de una suite principal digna de un gran hotel, el baño fue rediseñado para poder ser utilizado por posibles invitados, pero también de cara a la llegada de un nuevo miembro de la familia en caso de que fuera necesario.
Las ventanas del primer piso que dan al patio también se ampliaron, ofreciendo una vista sin obstáculos de un roble y la vegetación circundante. Una gran cortina de lino conecta el dormitorio con un vestidor, aportando suavidad y continuidad a ambos espacios. Sin acceso directo a la luz natural, el baño fue diseñado intencionadamente con una paleta de colores claros y brillantes para garantizar una continuidad estética con el resto del proyecto. Además, la iluminación de acento permite ajustar la intensidad según la hora del día y las necesidades de los nuevos propietarios.
Convertir el sótano en un lugar multifuncional
El nivel más bajo de la casa, el sótano, también se diseñó siguiendo la misma línea que el resto de la vivienda. Dado que el garaje ocupaba más de un tercio de la planta, el espacio restante tuvo que diseñarse para brindar versatilidad. Como resultado, esta parte de la casa puede convertirse sin problemas en un área de usos múltiples, que sirve como lugar para noches de cine, sesiones de entrenamiento, fiestas de pijamas o como un espacio dedicado para recibir a amigos y familiares.
LAS IMÁGENES DE MAXIME BROUILLET:
FICHA TÉCNICA:
- Proyecto: Residencia Wilson.
- Ubicación: Verdun (Quebec / Canadá).
- Superficie: 159 m².
- Completado: 2023.
- Autor: Entre Quatre Murs.
- Diseñadora / directora de proyecto: Debby Pagé.
- Contratista: Downs McGovern.
- Proveedores: Slik Design, Alumalco, Venosa, Fisher & Paykel, Unik Parquet, Brizo, The Rubinet Faucet, Laufen, Luminaire Authentik, Muuto, Ethnicraft, Mudconcrete, Stonetile y Ramacieri Soligo.
- Fotografías: Maxime Brouillet.
PLANIMETRÍA:
SOBRE ENTRE QUATRE MURS:
Entre Quatre Murs es un estudio de diseño y arquitectura de interiores de Montreal (Canadá), formado por un colectivo de diseñadores jóvenes y apasionados que van más allá para crear espacios habitables únicos, atemporales, cálidos y altamente personalizados. Su objetivo principal es mejorar la comodidad de la vida de sus clientes, evocar emociones profundas y traducir las identidades de sus clientes en espacios que realmente los reflejen.
Su filosofía de trabajo se basa en tres pilares fundamentales: funcionalidad, materialidad y luz. Utilizando un enfoque colaborativo y centrado en las personas, combinado con una meticulosa atención al detalle y una búsqueda inquebrantable de los mejores recursos disponibles en el mercado, el equipo de EQM crea constantemente espacios imbuidos de una sensación de bienestar y autenticidad.
Los diseñadores ven la vida como una serie de experiencias, una colección de momentos y recuerdos, y el diseño da forma al telón de fondo en el que tienen lugar la mayoría de estas experiencias. Creen que contratar a un interiorista va mucho más allá de crear un espacio estético, se trata de crear un lugar que refleje la personalidad de sus clientes y fomente su crecimiento.
Fuente: v2com newswire (Entre Quatre Murs)
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